Finalista en el concurso de Editorial Cerbero

Hace cosa de un mes, o dos (la verdad es que no lo recuerdo muy bien), os hablaba del porqué presentarse a un concurso literario nunca es una pérdida de tiempo. Pues bien, hará cosa de un mes, o dos (tampoco lo recuerdo), Editorial Cerbero anunció a través de su cuenta en Twitter un concurso de literatuits: microrrelatos que cogieran en un tuit (dejando espacio para el hashtag y la mención a la editorial). La cuestión es que me presenté con varios y con uno de ellos quedé finalista. A continuación os dejo todos los que presenté:

D.E.P. (Relato finalista)

«Olvidaron poner su nombre en el ataúd cuando la enterraron, pero sus uñas lo escribieron desde dentro».

Lo bello

«Le dijeron que lo bello estaba en el interior. Y se tragó los ojos».

Roto

«El dragón trató de escapar por el acantilado, pero descubrió que era imposible volar con las alas rotas».

Humanidad

«Bajo su piel solo había cables. No era humana, y aun así tenía lágrimas en los ojos».

Muerto

«Aquel planeta estaba muerto. Era imposible que allí vivieran humanos».

Nuevo dios

«Tras arrancarle la cabeza a Hades, Cerbero supo que era el nuevo dios del Inframundo».

El cliché

«El dragón seguía esperando a que su amada princesa lo salvara del príncipe».

Perfección

«Tras desmembrar los diez cuerpecitos cosí las mejores partes. Mi bebé sería perfecto».

Llamas

«El fénix amenazó con calcinarlos a todos si no ganaba».

Vida

«La Muerte se atravesó el estómago con la guadaña. Entonces comenzó a vivir».

Día de cumpleaños

«Mamá había muerto el día de mi noveno cumpleaños, por eso me alegré de que viniera a visitarme por el décimo».

Mentiras

«Lo primero que vio al morir fue a su mujer.

—¡Joder! Sabía que el cura mentía cuando nos casamos».

Cambio climático

«Entonces descubrieron que el cambio climático lo producía un dragón».

Manjar

«En el horno aún había restos de carne y un sonajero».

Shhh…

«No fue la pistola, sino el sonido del disparo, lo que mató al silencio».

Principio y final

«Viajó en el tiempo hasta el comienzo, ignorante de que el inicio y el fin del mundo eran el mismo instante».

Metamorfosis

«Todos le decían que era un capullo, pero esa noche, tras dormir, por fin sería mariposa».

Final feliz

«Cuando el príncipe le iba a dar el beso escapó de él con un salto. Prefería seguir siendo una rana».

Cenizas

«El dragón estornudó, y tanto la flor que amaba como el mundo quedaron reducidos a cenizas».

 

Y eso es todo. Como veis, en un par de días mi producción de microrrelatos y mi creatividad aumentaron de forma considerable. Así que ya sabéis, animaros a participar en esos concursos que os dan miedo. Creceréis como escritores.

Para despedirme de vosotros os dejo un enlace a la página de la Editorial Cerbero, en la que podéis comprar libretas con las portadas de los literatuits finalistas, además de los libros de la propia editorial. La negra es la mía y mola un huevo (o dos, si os gustan los números pares).

¿Cuál de los relatos que presenté os ha gustado más? ¿Conocíais Editorial Cerbero? ¿Alguno de vosotros escribe también microrrelatos?

¡Nos leemos!

Háskoz

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